Es una costumbre, che. La mujer lleva al marido a la puerta. Da o recibe un beso. Se para pensativa mientras él se va. Un pequeño saludo con la mano es opcional.
La estupidez es por cierto, un producto de la voluntad. La naturaleza aborrece el vacío, incluso en la mente. El doloroso vacío del aburrimiento actual es llenado y perpetuamente renovado por el cine, la radio, la televisión y las historietas cómicas. Como siempre, el principal resultado de la violencia es la necesidad de emplear mayor violencia.
Hay tanta gente que escribe para lucirse.
Yo empecé así y fracasé
hasta el día en que olvidé esas pretensiones.